¡Viva México cabrones!

Lamentable conocer el discurso que nuestros gobernantes enarbolan acerca de las luchas armadas que liberaron al país del yugo español cuando estamos peor que entonces, cuando la situación se agrava al punto de que a lo largo de ese tiempo innumerables luchas campesinas, obreras, sindicales y armadas se han suscitado. Y suceden porque es necesario, porque como entonces, hay quien tiene mas, quien tiene menos y quien tiene nada. Hay quien quiere todo, quien quiere algo y quien lucha por un algo. La historia está escrita de esa manera.

Lamentable encontrarse con el más vano patriotismo, glorificar la bandera y el estandarte libertador de la opresión continua que presume un icono importado, creado a imagen y semejanza del indio, he ahí su sentido de pertenencia, su fe, su opio, sus ganas de gritar ¡Viva México cabrones!. Y es que encuentro entonces sobre este orden de ideas, la utilidad de la historia oficial, entiendo ahora la razón de saludar a la bandera, de  entonar un himno, un símbolo de dominio, conmemorar cada héroe que permitió preservar este orden.

¿Anti patria? No. Pues, ¿Qué es México como nación? Territorio, población, Estado… No.

Un país no es más que su gente y yo amo a la gente.

Independencia al indio a cambio de dependencia. Cambio sólo la cara del patrón, su casta. Criollos, peninsulares, la corona española, ¿Quién se queda con el botín sino los mismos, los poderosos? Quienes tiempo atrás a cruz y espada “civilizaron” al salvaje. Mismos que a la fecha bajo su yugo mantienen.

Es entonces el grito de dolores lo que nos duele, no es un grito de guerra sino una orden el ¡Viva México cabrones!